El sol asoma, el calor se siente… es momento de decidir qué llevamos a nuestra copa. Aquí va una selección de 5 vinos para disfrutar en verano, ¡incluso dos ejemplares bajo alcohol*!
El verano es una época especial: nos relajamos, encontramos tiempo para nosotros y nos animamos a probar vinos ligeros, esos que nos hacen sentir preferidos y libres. Desde una tarde junto a la pileta, mientras el sol cae lentamente, hasta una ocasión más formal, estos vinos capturan un estilo exótico y aspiracional. Con sus notas frescas, texturas delicadas y colores vibrantes, evocan la libertad y el placer.
Ya sea en casa o en cualquier destino, cada brindis celebra la dolce vita.
Mikron Rosé. Bodega Krontiras
El rosado está de moda, y cuando las bodegas ofrecen uno de calidad, más fresco, ligero y pálido que el tradicional, los adoptamos con placer. Este Rosé de bodega Krontiras, sumamente especial es elaborado con uvas de Tupungato y Maipú. Desde su fundación la bodega apuntó a la biodinamia, certificando sus viñedos orgánicos por Demeter. Elaborado por Maricruz Antolin con syrah y Tempranillo, un corte que va de maravillas, este rosé resalta sus aromas de frutos rojos frescos pero también notas florales y cítricas. De estilo provenzal, su color rosa pálido combina expresividad y frescura y cierta estructura, haciéndolo muy versátil a la hora de sentarse a la mesa.
Datito: Con la propuesta tan rica y diversa que ofrece el país, no falta mucho para que en Buenos Aires se celebre la “Pinknic”, evento que se festeja cada mes de julio en los jardines del Randall´s Island Park en la ciudad de Nueva York.
Cruzat Cosecha Temprana – Rosé extra brut – Bajo Alcohol
Elaborado 100% con Pinot Noir, cosechada los primeros días de febrero de su finca en Perdriel. El vino alcanzó naturalmente un grado alcohólico bajo de 9.4°, luego de la toma de espuma en la botella. De rosado claro, de aromas frescos y delicados, frutal, con buena estructura y acidez. En boca destaca un paladar cremoso otorgada por el contacto con las lías. Un espumoso delicado, de buen equilibrio y elegancia que invita a tomar.
“Por el clima que tenemos en nuestro país, los espumosos suelen tener niveles de entre 12 y 14 grados de alcohol. Cruzat Cosecha Temprana tiene 9.4 grados: muy por debajo de la media de su categoría”, agrega su enóloga, Lorena Mulet.
Old Vines Torrontés de Bodega El Esteco
Desde su lanzamiento, este torrontés sorprendió por su complejidad aromática, donde destacan flores como los nardos y el azahar, junto a un sutil toque herbal. Su boca ofrece fineza junto a una intensidad moderada, que hacen de este torrontés un vino sumamente elegante, un desafío para la variedad. Lo termina su gran contrapunto entre equilibrio, frescura y cuerpo. Un exponente de clase mundial.
Argento Organic Pinot Grigio 2024, Bodega Argento
Que sea orgánico trae un plus a este Pinot Gris que destaca por sus delicados aromas florales y de frutas tropicales como el damasco maduro y el durazno. Sin dudas una buena creación de su enólogo Juan Pablo Murgia, que logró un vino que se siente vibrante, etéreo y sabroso a la vez. Ideal para beber como aperitivo.
*El Pinot Gris llegó por error al país, cuando a finales de los años 90 Francois Lurton quiso importar chardonnay pero le mandaron Pinot Grigio de los viveros franceses. La cepa se adaptó rápidamente a nuestro terroir y en la última década no ha parado de crecer tanto en superficie plantada como en consumo.
Emilia Clarea, Nieto Senetiner
De reciente lanzamiento, Nieto Senetiner una bodega con más de 130 años propone lo último para este verano. Vinos de “bajo alcohol” macerados con distintas hierbas y frutas, y luego carbonatados para lograr algo de burbujas. Elaborado a partir de uvas Semillón y Chenin e infusionado con limón y flor de sauco, ideal para servirse con hielo, como aperitivo o para la hora del brunch, perfecto!
Vinos “bajo alcohol” o desalcoholizados sin dudas marcan tendencia y ejemplos sobran. Nueva Zelanda elabora un buen porcentaje de sus vinos con bajo alcohol o desalcoholizados. En Europa ya encontrás bares que solo venden este tipo de vinos. En Burdeos, dos castillos de la orilla derecha ya han lanzado etiquetas sin alcohol y añadirán más este año y un grupo de productores de vino de la región ha abierto recientemente una instalación para eliminar el alcohol.
Por Marcelo Chocarro
