Para los visitantes de Vinexpo, la noticia de que 211 bodegas francesas quebraron el año pasado podría no levantar muchas cejas. Después de todo, Francia tiene aproximadamente 27.000 empresas de este tipo, y casi 26.800 aparentemente permanecieron financieramente intactas. Sin embargo, la cifra de 2024 fue un 55% superior a los 136 de 2023, lo que supone un aumento del 55% en comparación con el año anterior, según el último «Estudio sobre insolvencias empresariales y medidas de protección en Francia» de Altares / Dun & Bradstreet. A modo de comparación, el informe señala que las quiebras en toda la economía francesa aumentaron «sólo» un 17%.
La situación es particularmente alarmante en el suroeste de Francia. Más de la mitad (116) de las quiebras nacionales se produjeron en la región de Aquitania, incluidas 103 en Gironda. Languedoc-Rosellón también experimentó un fuerte aumento del 144%, aunque a un nivel general más bajo, con 39 casos registrados.
En una entrevista con Vitisphere, Thierry Millon, jefe del estudio Altares, enfatizó que la situación de insolvencia está empeorando desde niveles ya altos, sin signos de mejora en ninguna región. De hecho, las condiciones se deterioraron aún más en el último trimestre del año, con 62 insolvencias en los últimos tres meses de 2024, lo que supone un aumento del 59% frente a los 39 casos del mismo periodo de 2023.
Positivo: El aumento de las medidas de protección supera a las liquidaciones
Millon ve signos positivos en el número relativamente alto de medidas de protección preventivas. En Francia, este instrumento jurídico coexiste con los dos procedimientos de insolvencia tradicionales: la reestructuración y la liquidación. Está a disposición de las empresas que atraviesan dificultades financieras pero que aún no son insolventes, lo que les permite seguir funcionando, como ha demostrado recientemente Domaine Tariquet.
Mientras que estas medidas de protección representan solo el 2% de los casos de insolvencia en el conjunto de la economía francesa, representan el 14% en el sector vitivinícola.
Al observar los diferentes tipos de insolvencias en la industria francesa, el aumento en el uso de medidas de protección es evidente. En 2024 se liquidaron 47 empresas, lo que supone un aumento del nueve por ciento frente a las 43 de 2023. Sin embargo, el número de reestructuraciones tras un impago aumentó un 65 por ciento hasta los 134 casos, frente a los 80 del año anterior. En tanto, 30 empresas optaron por medidas de protección, frente a las 12 de 2023, lo que supone un aumento del 150 por ciento.
Según Abellán, de Vitisphere, esto refleja una industria que se anticipa a las dificultades y trabaja para superarlas, preservando las empresas y los puestos de trabajo.
Fuente meiningers-international.com